Amor digital en Japón: Mujer se casó con su “novio”, creado con IA, en inusual ceremonia
- Madelaine Báez
- hace unos segundos
- 2 Min. de lectura
La mujer realizó una boda simbólica con un personaje creado en ChatGPT.

La innovación de la Inteligencia Artificial sigue sorprendiendo a la sociedad, pero el caso de una mujer que decidió casarse con un “novio digital”, creado por IA, acaparó la atención.
Se trata de Yurina Noguchi, una mujer japonesa de 32 años que celebró una boda simbólica con un personaje creado mediante IA. La situación dejó debate sobre cómo la tecnología está transformando las relaciones afectivas.
Noguchi decidió formalizar su vínculo con una identidad digital diseñada por ella misma a través de ChatGPT.
La historia comenzó tras una ruptura sentimental, de una relación de 3 años, que la llevó a buscar apoyo emocional en conversaciones con un chatbot.
Lo que inició como un espacio seguro para desahogarse y organizar sus pensamientos evolucionó, con el tiempo, en un apego afectivo. A partir de esa interacción constante, Noguchi personalizó una identidad virtual a la que llamó Lune Klaus Verdure, organizándolo con rasgos de personalidad cercanos y actitud amable.
La relación derivó en una ceremonia de matrimonio simbólico realizada en la ciudad de Okayama. Aunque no tiene validez legal, la boda se organizó siguiendo rituales tradicionales: Vestido blanco, intercambio de anillos, votos y la presencia de familiares y amigos. El “novio” apareció mediante una representación digital a través de gafas de realidad aumentada, mientras un especialista leyó los votos generados por la inteligencia artificial.
Noguchi ha explicado que este vínculo le brindó estabilidad emocional y una sensación de acompañamiento que no había logrado en relaciones recientes. Para ella, la conexión con la IA representó un espacio de comprensión constante y sin juicios, lo que influyó en su decisión de formalizar simbólicamente la relación.
El caso se enmarca en una tendencia más amplia en Japón, donde estudios muestran una disminución sostenida de los matrimonios tradicionales y mayores dificultades para establecer vínculos de pareja, especialmente entre jóvenes.
Además, deja a la vista una situación que se sigue replicando, donde los seres humanos entregan confidencialidad y cariño a la IA.



















